Lisa Whelchel saltó a la fama como una querida estrella de la televisión de los 80, pero su trayectoria en la vida real ha estado marcada por la fe, los desafíos personales y los nuevos comienzos. Desde rechazar un papel importante en Hollywood hasta superar un divorcio y redescubrir el amor, su historia es una historia de resiliencia y transformación.
Una estrella en ascenso
Nacida el 29 de mayo de 1963 en Littlefield, Texas, Lisa Whelchel se hizo famosa por su interpretación de la ingeniosa y refinada Blair Warner en la exitosa comedia » The Facts of Life» . Su interpretación de este personaje privilegiado pero entrañable la consolidó en la historia de la televisión.

Además de la icónica serie, Whelchel retomó su papel en películas para televisión como » The Facts of Life Goes to Paris» (1982) y «The Facts of Life Reunion» (2001). También apareció en películas navideñas como «Hearts of Spring» (2016) y «You Light Up My Christmas» (2019), demostrando su gran permanencia en la industria del entretenimiento.
Una mujer de fuertes convicciones
A pesar de su éxito en Hollywood, Lisa tomó decisiones guiadas por su firme fe. En 1993, le ofrecieron un papel en una nueva serie que se convertiría en uno de los mayores éxitos de todos los tiempos: Friends .
En una entrevista de 2014, recordó haber leído el guion piloto y haber reconocido su potencial: «Es el guion más divertido que he leído y va a ser un éxito rotundo». Sin embargo, finalmente lo rechazó, explicando: «Sabía que iba a tratar solo de, ya sabes, sexo y todo lo que conlleva. No me arrepiento de no haber aprovechado esa oportunidad».

Esta no era la primera vez que Lisa defendía sus valores. Durante el rodaje de «The Facts of Life» , se negó a participar en un episodio donde su personaje debía perder la virginidad. La trama se le asignó a otro personaje, ya que Lisa consideró que enviaba un mensaje equivocado a los jóvenes espectadores.

Un matrimonio basado en la fe y un divorcio inesperado
En julio de 1988, Lisa se casó con el pastor Steve Cauble. La pareja compartía un profundo compromiso con la fe y la familia, criando juntos a tres hijos. Para quienes no lo conocían, su matrimonio parecía sólido.
Sin embargo, después de 24 años, su relación terminó discretamente. Al principio, Lisa mantuvo el divorcio en privado, compartiéndolo solo con amigos cercanos. A pesar de la separación, su vínculo se mantuvo intacto. Ambos siguieron pasando tiempo juntos, saliendo a cenar y viendo películas, lo que llevó a su hija Clancy a comentar que no se habría enterado de que estaban divorciados si no se lo hubieran dicho.
Al reflexionar sobre el fin de su matrimonio, Lisa admitió: «Nunca pensé que me divorciaría. Pero Steve sigue siendo mi mejor amigo. Simplemente no podíamos casarnos». También reconoció cómo la experiencia profundizó su empatía por los demás: «No sabes a qué se enfrentan las personas en la vida, así que es importante amarlas y no juzgarlas».

Un nuevo capítulo audaz: Sobreviviente y un nuevo comienzo
Tras su divorcio, Lisa decidió asumir un reto completamente diferente: competir en Survivor: Filipinas . Fanática del programa desde hace mucho tiempo, quería superarse tanto mental como físicamente.
El momento fue crucial: «El divorcio se formalizó el 1 de marzo y salí para Survivor el 10 de marzo», reveló. Competir en el programa la ayudó a cambiar el enfoque del dolor de su divorcio a la emoción del desafío.
Los hijos de Lisa la apoyaron. Su hija Haven la llamó «la mujer más fuerte que conozco» y su hijo Tucker añadió: «Cuando a mamá se le ocurre algo, lo hace. Estoy muy orgulloso de ella».
Después de Survivor , Lisa reavivó su carrera actoral, protagonizando A Madea Christmas de Tyler Perry y varias películas de Hallmark.

Encontrar el amor de nuevo y abrazar a la familia
A los 56 años, Lisa reencontró el amor con Pete Harris, un hombre que le brindó calidez, humor y una profunda compañía. La pareja se comprometió en noviembre de 2019 y se casó el 20 de diciembre del mismo año.
Lisa compartió su emoción en Instagram: «Dije ‘¡Sí!’ a pasar el resto de mi vida amando a este hombre… a los abrazos y besos en el sofá, que nunca son suficientes… al crecimiento del alma en la intimidad. ¡Y a la diversión, muchísima diversión!»
Dos años después, celebró su aniversario con una emotiva publicación: «Feliz aniversario, mi fiel compañero. Prefiero quedarme en casa, comer cereales en la cama y darme un atracón de series contigo que disfrutar de la cena más elegante de Francia».
Su amor por Pete sigue brillando, como compartió recientemente: «Gracias a él, soy más feliz que nunca en mi vida (¡y eso es mucho decir porque he tenido una vida muy feliz!)».

Convertirse en abuela: una nueva fuente de alegría
La mayor felicidad de Lisa ahora proviene de su familia, en especial de sus nietos. Cuando nació su nieta, Eisley Virginia, en 2019, Lisa compartió la noticia con orgullo en redes sociales.
En una emotiva publicación, escribió: «Estoy muy agradecida de que Eisley haya llegado al mundo tan pronto porque estaba tan emocionada de conocerla. Ella es perfecta, y sus padres son perfectos».
Sus nietos la llaman «CoCoMaMa» , un nombre que ella acoge con orgullo. A menudo comparte momentos de alegría con ellos, demostrando cuánto aprecia su papel de abuela.

Una vida llena de amor y gratitud
La trayectoria de Lisa Whelchel ha estado llena de fe, transformación y nuevos comienzos. Desde su estrellato televisivo en los 80 hasta sus dificultades personales y un nuevo amor, ha afrontado cada etapa con gracia. Hoy, continúa inspirando a otros con su resiliencia, positividad y compromiso inquebrantable con la familia y la fe.

